países sin visado
generaciones eliminadas
meses de tramitación
La ciudadanía italiana se transmite de generación en generación por jure sanguinis (derecho de sangre). No es necesario haber nacido en Italia, hablar italiano o ser 100%, 50% o incluso 25% italiano para poder optar a la ayuda. Un único antepasado cualificado es todo lo que se necesita.
La doble nacionalidad italiana puede reclamarse tanto por ascendencia materna como paterna, aunque ciertas normas restringen las vías por las que pueden solicitarla las personas con ascendencia italiana por vía materna.
Para obtener la nacionalidad italiana por descendencia, no es necesario hacer donaciones, realizar una inversión ni someterse a un examen de ciudadanía. Todo lo que se requiere es una prueba documental que respalde su solicitud. Para poder optar a ella, debe cumplir los siguientes requisitos:
Tiene que haber tenido un antepasado italiano vivo después del 17 de marzo de 1861.
¿Su antepasado italiano obtuvo alguna vez la nacionalidad de otro país? De ser así, debió ocurrir tanto después del 1 de julio de 1912 como después del nacimiento de su hijo.
Si su antepasado italiano nunca obtuvo la nacionalidad extranjera, lo más probable es que pueda obtener automáticamente un pasaporte italiano por descendencia.
¿Hay mujeres en su línea genealógica directa? Si es así, los hijos de estas mujeres deben haber nacido después del 1 de enero de 1948 para que pueda solicitar el reconocimiento por la llamada vía administrativa, por ejemplo, en un consulado o embajada italianos. Si, por lo demás, cumple todos los requisitos anteriores, pero tiene una mujer cuyo hijo nació antes del 1 de enero de 1948, aún puede solicitar la nacionalidad italiana, pero debe presentar la solicitud ante un tribunal italiano con la asistencia de un abogado italiano.
Si su antepasado italiano obtuvo la nacionalidad extranjera después del 15 de agosto de 1992 -independientemente de si fue antes o después de su nacimiento-, usted obtendría automáticamente la nacionalidad italiana.
El equipo de Latitude cuenta con expertos en más de 20 países. Podemos asesorarle en 14 idiomas. Permítanos ayudarle a encontrar la solución perfecta de migración de inversiones.
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Le enviamos nuestro formulario de admisión genealógica. A partir de la información que nos facilite, comprobamos si cumple los requisitos para obtener la nacionalidad italiana por ascendencia.
Una vez recibido el acuerdo firmado y el pago del anticipo, nuestro equipo jurídico recopilará todos los formularios gubernamentales y documentos justificativos necesarios. Nos pondremos en contacto con las administraciones públicas cuando sea necesario para elaborar su expediente.
Seguiremos construyendo su expediente, asegurándonos de que todos sus documentos se obtienen en el formato exacto requerido y a tiempo.
A medida que vayan llegando los documentos, los traduciremos y legalizaremos adecuadamente para su presentación en el municipio local, consulado/embajada o tribunal. En ese momento, le ayudaremos a obtener una cita consular si es necesario.
El consulado/embajada local, el tribunal o el ayuntamiento italiano evaluarán su solicitud y, una vez aprobada. Si la solicitud se presenta en un consulado, cada solicitante mayor de 18 años debe pagar una tasa legal de 300 euros al gobierno italiano. Una vez tramitada su nacionalidad, nos encargaremos de enviar todos los certificados de nacionalidad pertinentes. A continuación, podemos ayudarle a solicitar un pasaporte italiano.
Como ciudadano italiano, tiene todos los derechos y ventajas de un ciudadano de la Unión Europea. Eso significa que puede vivir, trabajar y estudiar en cualquier lugar de la Unión Europea sin restricciones y sin tener que justificar nunca su presencia. Además, puede votar en las elecciones locales, transmitir la nacionalidad a los miembros de su familia y disfrutar de una sanidad y una educación asequibles de primera clase.
Existen tres vías para obtener la nacionalidad italiana:
Para solicitarla, tendrá que haber reunido documentos importantes (como certificados de nacimiento, matrimonio, defunción y naturalización) para recrear su árbol genealógico y registrar su solicitud.
Una vez compilado, el expediente de ciudadanía se legaliza, se traduce y se entrega a un ayuntamiento italiano (si reside en Italia), a un tribunal italiano o a un consulado italiano (si reside fuera de Italia).
Por ley, las autoridades tramitan su solicitud de nacionalidad en un plazo de 730 días. Al ser un proceso tan largo, los solicitantes pueden saltarse el consulado y solicitar el reconocimiento inmediato de su solicitud ante los tribunales. Esto reduce significativamente el tiempo de procesamiento. Los solicitantes también pueden encontrar plazos de tramitación más rápidos solicitando el reconocimiento de su nacionalidad directamente en Italia.
Sí, Italia ofrece la doble nacionalidad.
El pasaporte italiano figura entre los cinco documentos de viaje más poderosos del mundo. En la actualidad, ocupa el 3er puesto. El pasaporte italiano permite viajar sin visado a 192 países, incluidos la zona Schengen de la Unión Europea, Hong Kong y el Reino Unido.
Nuestro equipo trabaja en más de 20 países de todo el mundo, asegurando una segunda nacionalidad o residencia en lugares deseables y abriendo las puertas a un futuro mejor.